Durante el embarazo, son muchas las mujeres que sufren de estreñimiento. Después del parto es otro momento en el que a veces también ocurre.
Os hablo hoy de las semillas de lino, de sus propiedades y de un pequeño remedio casero, muy sencillo pero eficaz.
Las semillas de lino, también llamada linaza son
ampliamente conocidas por ser una fuente importante de micronutrientes,
siendo ricas en fibra, manganeso, vitamina B1, y sobre todo, en ácidos
grasos omega-3.
Una característica única de las semillas de lino, es su contenido en mucílagos
(goma). "Mucílago" se refiere a la fibra soluble en agua, gelificante
que puede proporcionar un apoyo especial para el tracto intestinal.
Para regular nuestro tránsito intestinal y prevenir el estreñimiento, seguid esta fácil receta.
Receta: Ponemos 2 cucharadas de semillas de lino en un vaso de vidrio o bol y lo cubrimos hasta la mitad de agua. Se deja reposar toda la noche en el frigorífico. Por la mañana, veremos que se ha convertido en un gel viscoso. Nos lo podemos tomar así, o añadirle frutas desecadas y de esta forma tendremos como una especie de jalea.
Este preparadp podemos tomarlo en el yogur, mezclado con una macedonia de frutas, en zumo o batidos, etc.
Así que, prepara un tarrito con estas maravillosas semillas cuando vayas al hospital, será un buen aliado para que tu cuerpo vuelva a regularse.

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